Gracias a los avances en la medicina y en la sanidad pública, nuestros patrones de enfermedad han cambiado. Actualmente padecemosenfermedades distintas y tenemos más probabilidades de morir de formadiferente que la mayor parte de nuestros antepasados. Lo que nospreocupa y nos quita el sueño es otro tipo de enfermedades. Y una deellas es el estrés: atascos de tráfico, problemas económicos, excesode trabajo, relaciones sociales... Y el estrés sí puede generarenfermedades. En nuestra vida privilegiada, hemos sido los únicos (del mundo animal) con la suficiente inteligencia como para inventarnosesos agentes estresantes, y los únicos lo bastante estúpidos como para permitir que dominen nuestras vidas. Ante el gran muro de un agenteestresante no hay que suponer que existe una solución especial quelogrará derribar el muro, lo que hay que asumir es que a menudo,mediante el control de una serie de puntos de apoyo podemos escalarlo. Este libro es una útil guía para ello.