La experiencia psicodélica contradice la visión moderna del cosmos. En el pecho del ser humano están todas las estrellas. Muestra ununiverso radicalmente distinto, afín a cosmologías indígenas, hindúesy budistas. Las consecuencias son tan revolucionarias que, de serasumidas, transformarían por completo nuestra visión de la realidad.No es extraño que los diversos micropoderes, las prácticas y discursos dominantes que moldean cuerpos y subjetividades, hayan combatido lacontracultura psicodélica, impidiendo que se incorpore al sentidocomún moderno. Las "plantas de los dioses" (Hofmann) permiten unavaliosa experiencia estética y espiritual. Este libro, al tiempo quereivindica dicha contracultura, esboza una historia particular de lapsicodelia, de la mano de William Blake, Aldous Huxley, María Sabina,Albert Hofmann, Henri Michaux, Terence McKenna y Jeremy Narby. Lapsique profunda es una terra incognita. Ciertas sustancias permitenvisitar ese extraño lugar donde todo brilla con luz propia,desaparecen las restricciones del espacio-tiempo, se liberan lasataduras del lenguaje y lo visual surge de lo sonoro vibrante.